Sábado cumpleaños del mundo…día de festividad en el paraíso.
El sol irradió con fulgores ligeros…las aves reflexionaron sobre sus plumajes de tonalidades modulando para el Rey…los árboles con atuendos verdes danzaron y carcajearon para el Artista… el viento ejecuto una canción de bonanza.
Las flores vistieron de primores mientras los brotes de las rosas desenvolvieron sus coberturas… los mares vestidos de añil como niñas saltarinas lanzaron su burbujeo blanco serpentinamente sobre la arena diáfana innovando diseños de cortesía para el experto
Las bestias al considerarse tan fuertes emitieron bramidos y rugidos de caballerosidad… Adán y Eva a ciencia cierta asidos de la mano se exteriorizaron frente al Creador en reverencia y al ver la perfección de su organismo le expresaron gracias…
Sábado, toda la naturaleza se deleitó al ver la clausura de una faena omnipotente.
Dios había consumado su obra y ambicionó hacer una distinción para ti.
El orbe entero se detuvo para considerar que todo estaba ajustado, escrupulosamente constituido.
Los Ángeles desde el cielo avistaban a la creación finalizada y enviaron tarjetas anónimas de congratulaciones exaltando al Todopoderoso.
Sábado, fuiste designado por Dios para sosiego del hombre.
Llenas mis espacios, eres el ciclo que más ansió en el septenario.
Por tu medio me independizo de mis tendencias, de mis propósitos, de mis intranquilidades.
Ovaciono el aniversario del orbe…junto a los correspondidos.
Sábado, fastuoso día de galanteo inmaterial… te exalto… te venero
Julia Delfino sábado, abril 4 de 2011
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